Anti-conflicto
Su aroma dulce, fresco, cítrico y frutal nos protege de nosotros mismos aplacando olas de enojo e irritación cuando naturalmente nos costaría frenarlas. Un par de gotas evitan que nos invada la angustia y la tristeza evocando momentos de felicidad, paz y tranquilidad. Con Aceite Esencial de Naranja, nunca más una reunión donde los conflictos se elevan a niveles que no tienen retorno.